Viajeros nocturnos

"Obrar es fácil, pensar es difícil; pero obrar según se piensa, es aún más difícil". Goethe . "Piénsalo". Esta palabra la he leído o escuchado estas semanas más que ninguna otra. Porque se ve más cerca el momento de elegir, de dar un salto cuántico. ¿Acaso elegir no es desprenderse de un camino para tomar otro? Las semanas previas me torturé con la idea de lo que perderé si dejo mis actuales "privilegios", mi vida como la conozco hasta ahora desde hace casi seis años, con todo lo que implica. "Necesitas un cambio, necesitas probarte", me dice u na voz interna de manera tenue,  cuando me canso de la rutina, de la misma gente, de su indiferencia o incluso mala vibra. Pero a veces esa voz grita y me rompe los tímpanos. Y me increpa: "¿Si no lo haces ahora, cuándo lo vas a hacer?" "¡Si estuvieras conforme con tu vida como es, no existirían todos estos pensamientos, ni ensoñaciones diurnas!". Claro, ¿quién no sueña despi

Miedo a la equivocación, al auto engaño, ¿a la sugestión pasajera? Miedo a no saber qué es lo que en verdad se quiere. Miedo a no hacer las cosas... por miedo; temor a conformarse. Miedo a no creerse los propios sueños, miedo a no ver más allá de lo próximo. Miedo a perder privilegios y nunca recuperarlos. ¿De verdad son privilegios? Miedo a la inestabilidad. Miedo a ir tras algo inalcanzable, miedo a no ser buena, a no dar el ancho, miedo a que sólo sea un capricho... Tal vez lo sea... Una vez alguien me dijo que se sabe si algo es o no capricho cuando lo medimos con el cristal del sacrificio. Cuando sacrificas algo por eso que quieres, y lo soportas pase lo que pase, y estás dispuesto a pagar el precio, entonces ya no es un capricho. ¿Cuántos más hay como yo? ¿Cuántos soñamos con algo que ahora no tenemos? ¿Cuántos deberíamos dejar lo que tenemos para alcanzar eso que queremos? Y en mi caso, ¿es verdad que eso quiero? Miedo a no estar viendo claro, miedo a la indecisió

Me regalaste a Wilde, a Agatha Christie, a Fernando del Paso, incluso a Boccaccio y a otros tantos que no recuerdo. Muchos de los libros que me diste los leí en su momento, otros apenas. Y todos he sabido valorarlos hasta ahora, tantos años después. Tú me obsequiabas libros y yo toda mi atención, mi pensamiento a cada hora del día, mi primera noción del amor. Y fue un intercambio justo. Ya no te extraño, ya no extraño tampoco a la que era cuando estuvimos juntos. Ya no me alegra ni me entristece recordarte, sólo me ayuda a dimensionar lo que hoy vivo. A veces me digo: "¿qué me habría dicho en estos momentos sobre tal o cual cosa/persona/situación?". De vez en cuando te recuerdo y escribo cosas como esta, porque sin duda algo como lo que nos pasó es imposible olvidarlo. Hoy puedo ver las cosas más claras, más serenas y de forma menos improvisada. Estoy tranquila y mis esperanzas trato de ponerlas cada día al nivel de mis sueños. Tengo muchos y, si me confío, empiezo a di

Regreso, ocho años después, a este espacio. Para seguir cocinando letras, si es que tal cosa es posible. Porque escribir también es dialogar con uno mismo. Y porque el insomnio es mucho y hay que aprovecharlo. Pero, por ahora, sólo para reactivar esta hoja virtual. O lo que es lo mismo, para venir a saludar: ¡Holi!

Son ya la una de la mañana con trece minutos. El día esperado por mí y miles de personas más, unidas por el gusto de escuchar a La Oreja de Van Gogh, ha terminado ya. El diez de noviembre se nos ha ido entre los labios, repitiendo cada frase, cada palabra de las canciones con las que el grupo español nos deleitó por más de una hora en el Auditorio Nacional. Aún tengo la sensación de que estar ahí, entre las ráfagas de gritos, entre el calor apasionante de la admiración a esas cinco personas que nos hicieron explotar dentro del enorme recinto. Mi primera versión con la Oreja de Van Gogh en vivo fue simplemente genial. No me gusto estar ahí esa hora y media de concierto: me fascinó, me absorbió casi por completo (y digo casi porque cuando coreaba y me movía de forma hipnótica al compás de su música, no sólo los veía a ellos: un sinfín de recuerdos llegaban a mi mente, una mezcla de sentimientos, de ideas, de sensaciones que sólo se experimentan cuando un recuerdo doloroso y una bue

MONITOREO DE COMUNICACIÓN EN INFORMACIÓN DE LA MUJER A.C. (CIMAC) "PERIODISMO CON PERSPECTIVA DE GÉNERO" VIERNES 24 DE ABRIL DE 2009 Este día no se registró mucha información en el sitio. Sin embargo, las breves apareció lo siguiente: MUJERES EMBARAZADAS PUEDEN RECIBIR TRATAMIENTO CONTRA LA INFLUENZA, DICEN ESPECIALISTAS. México, DF.- Las mujeres embarazadas, aunque son más vulnerables a la influenza por los cambios en su sistema inmune durante la gestación, debido a las bajas y cambios constantes en su sistema inmune, pueden recibir medicación prescrita por profesionales de la medicina, señala la Fundación March of Dimes. ENFRENTAN MADRES DEL ÁREA METROPOLITANA DE LA CIUDAD DE MÉXICO DIFICULTADES ANTE SUSPENSIÓN DE CLASES. México DF.- Ante la suspensión de clases en todas las instituciones públicas y privadas del área metropolitana de la Ciudad de México, por la epidemia de influenza, numerosas madres de familia que trabajan también fuera de su casa se enfrentaron hoy al pr